Page 19 - Programa Festa Major 1951 (Falta la foto de portada i pags 49 a 53) - Ajuntament de Cassà
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Cuatro palabras sobre el corcho






        cz.JEaido explicar e l por qué del escudo de Cassa. Por  mos mas de cerca. Cincuenta silos de vida corcho-taponera,
         ) l   otra parte , la erudición local. -siempre tan dada a  unos cuantos centenares de familias dominando el secr eto
               la polémica, sea la de donde sea  , ha explicado  industrial de la co marca, dos o tre s fabri cas confinando los
        su s cosa s sobre el asunto, Por tanta, sobre el origen de  limites dcl silencio nocturna con el zumbido de sus moto-
        Cassa, sobre su tronco de nobleza carnpesi na y ese su  res; luego , otras f àbricas, la presencia en algunos domici-
        próspero sigla XVI - tan de grato recuerdo si fuese conoci-  lias del -triador» , del «taper» -en la anti gua versión de la
        do - , se ha escrito to da lo que se podia buenamente declr;  artesanía a tanto el millar, del respetad o y envidiado tra-
        y aun se han cometido la mentables pecades de reiteración.  baja a dom idlio-; y, fina lmente , la presencia ,- en familia
           Queda un punto real: el mas humana , el que tod os vivl-  nume rosa, en paisaje inabarcable- , de la encina corche ra,
                                                               crean un cuadro hoy aun desdei\ado por los pintore s de sol
                                                               y sambra, pera entera, peculiar, definitivo.
                                                                 Nada ha leniJo tanta influencia en la historia de estos
                                                               últimos cincuenta años que ha cumplido el Bajo Ampurdàn
                                                               como formación de una entrañable conciencia col ectiva,
                                                               como la matización de un clima de homogeneidad , de un
                                                               aire de familia, hoy generalizado en tod os los estamentos
                                                               sociales de aquí y de alia, de Palafrugell, de Llagostera, de
                                                               Cassa , de San Feliu. Esa tiene importancia; confiere carac-
                                                               ter. El ampurdanés, -que sigue siendo fero zmente indivi-
                                                               dualista en las zonas del viento- , ha logrado acoplarse,
                                                               organizar Sl! conciencia gremial en esa madura prolonga-
                                                               ci ón de la comarca grande que es nuestra tierra chica de La
                                                              Selva. Quizé en eso, se pierdan valores anecdólicos; pera
                                                               se gana en consistencia. Va hubo -(entre tan tos escritores
                                                               rurales de «Baldiró:t y «Layeta», entre tantos creadores de
                                                               lo que h0Y lIamaríamos el rtecnicolor>l rural)- , un hombre
                                                               que enlendió lo que ocurría. y lo que iba a ocurrir en tcrno
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